Esto es la jungla...
Publicado: Vie 21/08/09 10:23
Bien, os comento mi relato acaecido ayer, cuando me dirigía a casa de mis padres...
Ojo tocho, ¡a ras!
La distancia que me separan de mis progenitores no es mucha (unos 2Km), además, prácticamente en línea recta por la misma calle. Bien, en un tramo de unos 300 metros me encuentro:
-Furgoneta conducida por dos sudamericanos (podrían haber sido cualquiera) que estaban detrás mía parados en un semáforo que regulaba el cruce que tenía delante de mi napia. Bien, ni cortos ni perezosos deciden cambiar el sentido de la marcha pasando a un mísero milímetro de mi y saltándose tanto el semáforo como la línea contínua que separaba ambos carriles. Me asusté y todo... "¡Leñe, que me violetean por detrás!".
-25 metros más adelante, sí, solo 25 metros, cuando el semáforo se pone en verde y me da paso a mí, me doy cuenta que en ese cruce, por la derecha, va una bicicleta a toda pastilla y se salta el semáforo, por que él lo vale... He de hacer un pequeño zigzagueo para no tragarme al Contador de turno...
-Después del zigzagueo me encuentro un paso de cebra de estos que están señalizados, pintados de rojo y con rasante (vamos, que o paras y lo pasas lento o te pegas un salto que te dejas los güitos en el asiento, amén de darle leña al mono a la suspensión y bajos de la moto). Pues bien, cuando estoy pasando, viene un niñato en su Yamaha Jog RR, con tubarro incorporado a toda pastilla como si fuera un peatón, incorporándose a la vía y pasando a escasos centímetros de mi... Ni qué decir que si se le hubiera ido la moto y me hubiera endiñado, le habría partido hasta el alma...
-Proseguimos, ahora sí, un poco de calma, 50 metros sin que ocurra nada... Menos mal... ¡¡¡Y un carayo!!! Siguiendo la vía en línea recta me encuentro con una incorporación a mi vía desde la derecha, donde aparece un monovolumen a toda ¡! cuyo conductor me mira fijamente. Ante tal incorporación, freno por que eso de "aminorar la marcha para que los demás conductores sepan de nuestras intenciones", pues como que no iba con él. El pavo deja medio monovolumen en mi carril, por lo que he de sortearlo... Eso sí, el tío es buen cristiano y me saca la mano, como diciendo "perdona, campeón". Si me hubiera dado y tirado al suelo supongo que me habría dado un besito y caricias para pedirme perdón.
Bien, hasta entonces ya estaba hasta los cojones, preguntándome qué coño pasa aquí, a ver si me ha mirado un tuerto o qué...
-30-40 metros más adelante, otro semáforo que regula otro cruce. Por cierto aquí vive Lopera, y aprovecho para decirle que se vaya ya de mi Beti, coño.
Bueno, seguimos. En ese cruce me paro (jurando en hebreo, eso sí) y me veo venir un coche a toda pastilla que sale de la derecha del cruce para incorporarse a mi vía (en el sentido contrario, se entiende). Pues mira que ese señor pasa a escasos centímetros de mi, ya que para él, eso de los carriles no va... ¡¡Y eso que yo estaba en el centro del mío!! El notas necesitaba más espacio para meter su mercedes... Será cabrón...
-No os asustéis, que la cosa sigue.
-Y eso, seguimos. Salgo del semáforo, y aquí la calle se estrecha, hay un solo carril para cada sentido. En mi carril me encuentro un coche completamente de lado y parado, así, sin más. Me digo, ya descojonao: ¡qué daño ha hecho el Pantene Pro-V con el "porque yo lo valgo"!
Ante tal maniobra digna de admiración, me veo cómo un ciclomotor se aproxima por el carril contrario, con una pequeña cola de coches detrás de él. El que estaba cruzado en mi carril, estaba esperando a que los del carril contrario pasaran, para él poder salir de su estacionamiento. Mientras, a los de mi carril, que esperen coño, que es agosto y no hay estrés.
Pues bueno, mientras espera, y la motillo del otro carril va a su ritmo de jubilado y va desesperando a los coches que lleva detrás, ocurre lo siguiente:
Mientras yo freno (os recuerdo que me obstaculizaba un coche que salía de su estacionamiento), me veo que el coche que viene en sentido contrario estaba adelantando al ciclomotor. jdr, ¿no hay sitio para hacerlo? No, mejor me salto la línea contínua, me como al que viene de frente, o sea, yo mismamente, y que le den a todo el mundo. Ante tal maniobra tengo que irme a la derecha como un condenado, si no quiero que me manden a la azotea de la casa de Lopera.
AQUÍ OS PODÉIS IR IMAGINANDO EL ESTRÉS ACUMULADO EN IRA, ODIO Y DEMÁS LINDECES QUE RONDABAN MI CABEZA...
-Y para finalizar, otro cruce, aunque éste no estaba regulado por semáforos, si no por un ceda el paso, que no el vaso, más grande que el giraldillo. Bien, me voy acercando y pasa un taxi a toda ¡!. Me digo, bueno, aceptamos barco y como iba rápido y yo todavía no he metido morro, el tío ha pasado... Pero claro, la cosa no quedaba aquí, detrás, a unos metros, y cuando yo ya había iniciado mi incorporación al cruce, aparece otro taxi a toda ¡! que frena como Toni Elías antes de una curva. Menos mal que lo hizo así, si no me veía en el hospital sí o sí.
Casi me tira... Menos mal que pude poner la pierna en el suelo y ésta tuvo fuerza para poder aguantar la moto y a mi durante un segundito o dos para poder erguirme de nuevo...
Hice que bajara la ventanilla, y le digo muy tranquilamente:
"Mire usted, señor taxista, sé que es brusco y que le ha tocado a usted, pero es que con alguien me tengo que desahogar, así que me voy a cagar en su **** madre, así, tal como suena. Y si tiene huevos se para, nos partimos la cara y le explico el por qué le ha tocado a usted."
Me respondió: "Lo siento".
Esto es la jungla señores, es alucinante. Pocas cosas pasan. Cuando voy en coche no hago el ganso, en moto tampoco... Pero es que la gente es la ¡!... Eso sí, la Policía Local mientras estaría multando a los pobrecillos que no encuentran sitio para aparcar o a los que se niegan al impuesto revolucionario de la zona azul... Para eso sirven...
Es lamentable.
Tened cuidado ahí fuera, compañeros, esto es la jungla.
Ojo tocho, ¡a ras!
La distancia que me separan de mis progenitores no es mucha (unos 2Km), además, prácticamente en línea recta por la misma calle. Bien, en un tramo de unos 300 metros me encuentro:
-Furgoneta conducida por dos sudamericanos (podrían haber sido cualquiera) que estaban detrás mía parados en un semáforo que regulaba el cruce que tenía delante de mi napia. Bien, ni cortos ni perezosos deciden cambiar el sentido de la marcha pasando a un mísero milímetro de mi y saltándose tanto el semáforo como la línea contínua que separaba ambos carriles. Me asusté y todo... "¡Leñe, que me violetean por detrás!".
-25 metros más adelante, sí, solo 25 metros, cuando el semáforo se pone en verde y me da paso a mí, me doy cuenta que en ese cruce, por la derecha, va una bicicleta a toda pastilla y se salta el semáforo, por que él lo vale... He de hacer un pequeño zigzagueo para no tragarme al Contador de turno...
-Después del zigzagueo me encuentro un paso de cebra de estos que están señalizados, pintados de rojo y con rasante (vamos, que o paras y lo pasas lento o te pegas un salto que te dejas los güitos en el asiento, amén de darle leña al mono a la suspensión y bajos de la moto). Pues bien, cuando estoy pasando, viene un niñato en su Yamaha Jog RR, con tubarro incorporado a toda pastilla como si fuera un peatón, incorporándose a la vía y pasando a escasos centímetros de mi... Ni qué decir que si se le hubiera ido la moto y me hubiera endiñado, le habría partido hasta el alma...
-Proseguimos, ahora sí, un poco de calma, 50 metros sin que ocurra nada... Menos mal... ¡¡¡Y un carayo!!! Siguiendo la vía en línea recta me encuentro con una incorporación a mi vía desde la derecha, donde aparece un monovolumen a toda ¡! cuyo conductor me mira fijamente. Ante tal incorporación, freno por que eso de "aminorar la marcha para que los demás conductores sepan de nuestras intenciones", pues como que no iba con él. El pavo deja medio monovolumen en mi carril, por lo que he de sortearlo... Eso sí, el tío es buen cristiano y me saca la mano, como diciendo "perdona, campeón". Si me hubiera dado y tirado al suelo supongo que me habría dado un besito y caricias para pedirme perdón.
Bien, hasta entonces ya estaba hasta los cojones, preguntándome qué coño pasa aquí, a ver si me ha mirado un tuerto o qué...
-30-40 metros más adelante, otro semáforo que regula otro cruce. Por cierto aquí vive Lopera, y aprovecho para decirle que se vaya ya de mi Beti, coño.
Bueno, seguimos. En ese cruce me paro (jurando en hebreo, eso sí) y me veo venir un coche a toda pastilla que sale de la derecha del cruce para incorporarse a mi vía (en el sentido contrario, se entiende). Pues mira que ese señor pasa a escasos centímetros de mi, ya que para él, eso de los carriles no va... ¡¡Y eso que yo estaba en el centro del mío!! El notas necesitaba más espacio para meter su mercedes... Será cabrón...
-No os asustéis, que la cosa sigue.
-Y eso, seguimos. Salgo del semáforo, y aquí la calle se estrecha, hay un solo carril para cada sentido. En mi carril me encuentro un coche completamente de lado y parado, así, sin más. Me digo, ya descojonao: ¡qué daño ha hecho el Pantene Pro-V con el "porque yo lo valgo"!
Ante tal maniobra digna de admiración, me veo cómo un ciclomotor se aproxima por el carril contrario, con una pequeña cola de coches detrás de él. El que estaba cruzado en mi carril, estaba esperando a que los del carril contrario pasaran, para él poder salir de su estacionamiento. Mientras, a los de mi carril, que esperen coño, que es agosto y no hay estrés.
Pues bueno, mientras espera, y la motillo del otro carril va a su ritmo de jubilado y va desesperando a los coches que lleva detrás, ocurre lo siguiente:
Mientras yo freno (os recuerdo que me obstaculizaba un coche que salía de su estacionamiento), me veo que el coche que viene en sentido contrario estaba adelantando al ciclomotor. jdr, ¿no hay sitio para hacerlo? No, mejor me salto la línea contínua, me como al que viene de frente, o sea, yo mismamente, y que le den a todo el mundo. Ante tal maniobra tengo que irme a la derecha como un condenado, si no quiero que me manden a la azotea de la casa de Lopera.
AQUÍ OS PODÉIS IR IMAGINANDO EL ESTRÉS ACUMULADO EN IRA, ODIO Y DEMÁS LINDECES QUE RONDABAN MI CABEZA...
-Y para finalizar, otro cruce, aunque éste no estaba regulado por semáforos, si no por un ceda el paso, que no el vaso, más grande que el giraldillo. Bien, me voy acercando y pasa un taxi a toda ¡!. Me digo, bueno, aceptamos barco y como iba rápido y yo todavía no he metido morro, el tío ha pasado... Pero claro, la cosa no quedaba aquí, detrás, a unos metros, y cuando yo ya había iniciado mi incorporación al cruce, aparece otro taxi a toda ¡! que frena como Toni Elías antes de una curva. Menos mal que lo hizo así, si no me veía en el hospital sí o sí.
Casi me tira... Menos mal que pude poner la pierna en el suelo y ésta tuvo fuerza para poder aguantar la moto y a mi durante un segundito o dos para poder erguirme de nuevo...
Hice que bajara la ventanilla, y le digo muy tranquilamente:
"Mire usted, señor taxista, sé que es brusco y que le ha tocado a usted, pero es que con alguien me tengo que desahogar, así que me voy a cagar en su **** madre, así, tal como suena. Y si tiene huevos se para, nos partimos la cara y le explico el por qué le ha tocado a usted."
Me respondió: "Lo siento".
Esto es la jungla señores, es alucinante. Pocas cosas pasan. Cuando voy en coche no hago el ganso, en moto tampoco... Pero es que la gente es la ¡!... Eso sí, la Policía Local mientras estaría multando a los pobrecillos que no encuentran sitio para aparcar o a los que se niegan al impuesto revolucionario de la zona azul... Para eso sirven...
Es lamentable.
Tened cuidado ahí fuera, compañeros, esto es la jungla.