Después de la cebollada aún he metido en este cuerpecillo serrano y en el de mi señora unos mil kilometrillos más.
Un placer poder compartir una nueva cebollada con todos sin excepción, aunque como siempre me faltó mucho tiempo para poder hablar un poco más con todos y cada uno, aparte de tener que salir cagando pepinillos para Valencia, aunque así pude acompañar a Jorge, menuda ventolera.
Ahora me pondré a ver fotos, me pasaré al post de la kedada de fallas... jdr, una semana sin entrar y lo que hay por ver, que faenazo que dais.
pues si que está lejos Valencia